sábado, 30 de abril de 2011

Pero tú y yo ya no coincidimos


Coincide que mientras tú ves el sol, la luna ya me abrazó. Coincide que mis manos ya no tiemblan al escuchar tu voz y nuestro tiempo terminó. Coincidimos nosotros, enmudecidos tras palabras que nos perseguían desde hace un tiempo ya. Coinciden nuestras demás preocupaciones y sueños a través de caminos opuestos. Coincide que mientras tu voz cambia, la mía ya no se quiebra al hablar de lo que fue. Coinciden hechos, razones de un pasado que no pudimos olvidar. Coincide que tú no quisiste y yo no te dejé.