martes, 15 de junio de 2010

"I can make your bed rock"

Me recostaba en su cama, hablaba con él, nos contábamos nuestros días, lo usual. Juntos mirábamos el techo y de vez en cuando me preguntaba si lo amaba, a lo que yo siempre respondía "sí, con todo mi corazón", ponía voz de infanta y lo repetía unas tres veces. Conversábamos sobre los estudios, el trabajo, nuestros amigos, fútbol, el amor, películas, libros, canciones y muchos otros temas que habían marcado nuestras vidas de una forma u otra. Al recordar anécdotas, yo empezaba "recuerdas cuando tú y yo...", y no llegaba a terminar la frase sin que él me corrigiera con un "no somos tú y yo, somos nosotros". Yo solo temblaba de amor. Juntos sudábamos nuestros días y noches, nos quitábamos el frio, soñábamos, éramos nosotros. Yo era la reina de su cama, la doncella de su almohada. Él era mi abrigo, mi espejo y me reflejaba en el. Éramos nosotros.

"I can make your bed rock" - él cantaba.

Cantaba mientras pasaba nuestra canción del momento y estallábamos en carcajadas, nos mirábamos y no resistíamos al beso que nuestros labios nos invitaban a compartir con ellos. Yo sabía que él era el único que movía mi cama de esa manera, sabía que yo era la única que hacía lo mismo con la suya. Así nos movíamos y éramos nosotros, una vez más.

1 comentario: